Astonishing X Men de Whedon y Cassaday es un buen ejemplo de cómic de superhéroes hecho con calidad. Me leí el primer número cuando salió hace unos seis meses y la verdad es que me pareció más de lo mismo pero con un buen dibujo. Decidí comprarme los cinco números siguientes y esperar a leerme de un sola tacada todo el arco argumental titulado "El don". Hice bien porque una vez leída toda la historia seguida me ha parecido más que aceptable. Creo que es lo mejorcito que se ha hecho con los X Men desde los episodios del gran Morrison y Quitely. Whedon ha traído a algunos viejos y entrañables personajes de la Patrulla X y los muestra bajo un enfoque más maduro, realizando unos diálogos espléndidos.
El hilo argumental que sostiene este primer arco introduce una idea nueva muy interesante y es el tratamiento de los poderes mutantes como un enfermedad llevándonos, aunque sea superficialmente, al debate sobre si cualquier colectivo que no es mayoritario, que es marginal, que es diferente, lo es porque sufre una enfermedad (incluso en el cómic se menciona a los gays). Esa interpretación de lo diferente como enfermo es muy interesante ya que nos puede conducir a peligros autoritarios muy difíciles de detener. El guión es ágil, tiene sus buenas dosis de acción y resulta muy entretenido.
A destacar sobre todo el magnífico dibujo de Cassaday, que desde su labor en Planetary se ha convertido en uno de mis dibujantes favoritos. La magnífica combinación que realiza de realismo y de espectacularidad, además de un nuevo look más superheroico de los X-Men hacen de este artista uno de los mejores dibujantes que han pasado por el universo mutante. Otro aspecto muy interesante es el estupendo color de Laura Martin que proporciona a la serie una atmósfera muy peculiar. Habrá que seguir con atención el desarrollo de Astonishing X-Men porque prometen ser uno de los cómics de superhéroes del año.
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