Reflexiones de un bloguero tras un año

Hace poco conmemoraba con este post el año de nacimiento de este blog. Cuando inicié esta aventura lo hice un deseo de emular a los blogs que leía periódicamente (la cárcel de papel, UTCON, ES LA HORA DE LAS TORTAS!!!, tirafrutas, Zona Negativa, Vía News, El blog de Jotace, …), y en los que esporádicamente dejaba algunos de mis comentarios.

El cómic es una de mis mayores aficiones, tengo otras, ya que no sólo de cómic vive el hombre. Soy cinéfilo, me gusta la lectura, y soy muy rockanrolero, pero el cómic tiene ese algo de afición temprana, de mundo fantástico en el que viví mi niñez, de redescubrimiento en la madurez y de pasión, que otras aficiones no suponen para mí.

Cuando descubrí que existían unos blogs que hablaban de tebeos y de este mundillo, se abrió todo un universo de posibilidades ante mí. Tebelogs suponía una magnífica herramienta para estar al día y conocer más y más blogs que no hacían más que aparecer. Viví con pasión todo el tumultuoso proceso de movimientos de derechos de edición en España de Marvel y DC. La noticia que adelantó Álvaro Pons de la pérdida de Marvel por Planeta y de la entrada de Panini en el mercado español del cómic supuso todo un terremoto, que fue comentado y debatido en diferentes blogs. Y no digamos nada de todas las especulaciones que hubo con la pérdida de los derechos de DC por Norma.

Además, muchos blogs daban su opinión sobre cómics que yo leía, y sobre los cuales yo también quería opinar. Y no sólo esto, sino que aparecían polémicas sobre el mundo del cómic de las que yo quería ser partícipe.

Nunca había manejado un blog, y además no soy un genio de la informática, por lo que tenía ciertos reparos en meterme en este tinglado. Además estaba el tiempo. Tenía miedo de no disponer del tiempo necesario para poder atender un blog que se actualizase periódicamente. Pero por otra parte, tenía muchas ganas de crear mi propia tribuna de opinión desde la cual dar a conocer mis neuras, mis gustos o mis fobias comiqueras.

Me lancé al ruedo, y desde entonces he aprendido un poquito más de informática y he sacado el tiempo de donde he podido. La experiencia ha sido magnífica, ya que para mí escribir es una actividad que me gusta, pero que muchas veces no ejercito por esa maldita falta de tiempo. Además he conseguido actualizar el blog lo máximo posible expresando mis gustos y mis opiniones libremente.

Cuando comencé, me obsesionaba la falta de comentarios, ya que una de las razones por las que me lancé a tener un blog, era la de debatir sobre determinados temas. Poco a poco fueron apareciendo comentarios y visitantes más o menos regulares con los que establecí cierta complicidad. Nunca he recibido insultos, ni desconsideraciones. El debate, cuando lo ha habido, ha sido siempre educado y respetuoso, y eso es algo que observo en toda la blogosfera comiquera (siempre hay excepciones).

Otra cosa que me empezó a obsesionar y de la que ahora paso bastante, son las visitas. En un momento casi me forzaba a conseguir el mayor número de visitas diarias y hacía una estúpida competición conmigo mismo. Ahora, me tomo las visitas como algo anecdótico, a título de curiosidad y casi estadístico, para observar qué es lo que interesa a la gente. Escribo sobre lo que me apetece y me da igual el número de visitantes. Eso sí, como a todos los que hacemos blogs, me gusta que me visiten y que me lean. Eso es lo que ayuda a continuar esta tarea.

Otro momento bonito de este año fue cuando el equipo de ES LA HORA DE LAS TORTAS!!! se puso en contacto conmigo proponiéndome colaborar en su blog. Dije que sí, sabiendo que tendría que sacar más tiempo para hacer reseñas semanales. El tiempo es evidente que lo he sacado y la experiencia me ha parecido buenísima, porque he visto trabajar a auténticos monstruos blogeros como son Rafa Domene y Laintxo. Además, el estar dentro de un equipo me ha enriquecido y me ha ayudado en momentos en los que da la sensación que uno esta sólo en una afición que a veces parece de locos.

Tebeonauta ha ido cambiando a lo largo del año, y no sólo en el diseño del blog, sino también en contenidos. Quizá ha ido madurando como lo ha hecho un servidor. Espero que todas estas reflexiones sirvan para que los habituales que entráis por aquí me conozcáis un poquito más, y para animar a los que no tienen todavía un blog que lo creen y se lancen a esa plaza pública que es Tebelogs para compartir inquietudes, gustos opiniones y lo que haga falta.