miércoles, 3 de mayo de 2006

Una fantasía de Guibert y Bavid B.: El Capitán Escarlata


El Capitán Escarlata es otro maravilloso tomo de Guibert (el mismo que el de ese gran cómic titulado El Fotógrafo) editado por Glénat y con guión de David B. Guibert demuestra que es uno de los mejores artistas en el panorama no ya sólo del cómic europeo, sino también mundial. En esta obra su estilo es elegante, tiene un toque clásico pero a la vez muy original. Como sucede en El Fotógrafo su arte se adapta a la historia como un guante, no sólo en el dibujo en sí, sino también en el magnífico color que aplica a sus páginas.

La historia es un homenaje que realizan David B. y Guibert a la obra del escritor francés Marcel Schwob, situándose en el París de finales del siglo XIX. El guión de David B. (como sucede en otras obras suyas) bascula entre lo onírico, lo fantástico e incluso lo surrealista. La pseudo biografía que realiza de Marcel Schwob es como un cuento imaginario en el que el protagonista aspira a vivir una irreal aventura fantástica. Así, el escritor francés sale (¿imaginariamente?) de su caparazón protector y abandona su anodina vida conformada exclusivamente por las lecturas de novelas de aventuras. La elección por parte de David B. de los piratas como elemento identificativo de las historias aventurescas y las imágenes del barco pirata sobrevolando los edificios parisinos nos recuerdan inevitablemente a Peter Pan volando por la noche londinense, y nos lleva a retratar a Marcel como alguien que en cierta forma sufre el complejo de Peter Pan, de ese niño que no quiere crecer.

Quizá el único defecto que le encuentro a este álbum esté en la caracterización de algunos personajes, que son mostrados de forma algo esquemática, como es el caso de la amada de Marcel o el propio protagonista e incluso su antagonista el Capitán Escarlata; lo que lleva a que el cómic sea algo frío y resulte poco pasional. Sin embargo hay personajes cuyos diálogos son magníficos como es el caso del comisario y su ayudante.

Finalmente destacar la magnífica edición de Glénat (como es habitual en esta editorial), incluyendo el cuento escrito por Marcel Schwob, “el rey de la máscara de oro”, al que se hacen referencias explícitas en el propio cómic.

No hay comentarios:

Publicar un comentario