viernes, 18 de mayo de 2007

The Darkness, ni chicha ni limoná


Compré el primer número de Darkness, editado por Norma, porque los autores me parecieron interesantes. Paul Jenkins como guionista y Dale Keown a los lápices tienen el suficiente atractivo como para por lo menos darles una oportunidad.

Ya en su momento leí algo de la anterior etapa de esta serie publicada por Planeta, con guiones de Garth Ennis y dibujo de Marc Silvestre. Otra pareja a priori interesante, pero con un resultado horroroso. Eso era lo que me retenía para probar de nuevo, sin embargo como decía antes me decidí a probar.

Mi opinión sobre este cómic es que sin estar mal (como se suele decir en estos casos, es un tebeo hecho con oficio) falla en algunos aspectos que considero fundamentales. Y es que lo que menos me gusta es esa indefinición en cuanto al género, que al final no es ni chicha ni limoná. No sabemos si estamos leyendo una historia de género negro o de terror, así el protagonista Jack Estacado es un personaje poco definido teniendo un doble papel entre mafioso y demoniaco, que no ayuda para nada a que nos identifiquemos con él. El cómic va pasando de lo que es una venganza entre gánsters a un relato de perdición, condena y maldición diabólica. Siendo Estacado una especie de Motorista Fantasma, pero en versión thriller, sin decantarse demasiado por lo terrorífico.

El comienzo del cómic resulta atrayente ya que nos muestra una historia de traiciones y venganzas que va evolucionando hacia lo que es la muerte y posterior resurrección del protagonista en lo que parece una metamorfosis de la serie. Sin embargo el desarrollo de la idea inicial decepciona ya que cae en los tópicos de un cómic de violencia, sangre y destrucción absurda. Por otra parte Jenkins, como buen guionista que es, sabe construir un desarrollo narrativo entretenido apoyado en unos buenos diálogos. Con respecto al dibujo de Dale Keown, decir que simplemente se muestra correcto, muy lejos de la espectacularidad de su etapa en Hulk junto a Peter David.

The Darkness es otra nueva muestra de un tipo de cómic que no se atreve a dar el salto definitivo hacia lo innovador, repitiendo viejos esquemas ya muy superados, aunque sea de la mano de unos buenos autores.

2 comentarios:

  1. Vamos, lo que ocurre desde hace años con cualquier cosa escrita por Paul Jenkins: casi todo es mediocrillo y sin ser malo es completamente prescindible.
    Ojalá algún dia vuelva el Jenkins que me maravilló en Hellblazer y me enamoró en la miniserie de los Inhumanos.

    FOXXXXXXXXXXXXXXXX

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  2. Tienes toda la razón nacho. A mí tambien me entusiasmó con los Inhumanos, y Lobezno: Origen no estaba nada mal tampoco.

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