Viene del post anterior
A mitad del año 1995, cuando comienzan los indicios de que la sociedad entra en crisis, muchos de los supervillanos de la Tierra buscan sacar ventaja de esta nueva situación explotando la incertidumbre y el desastre. La Liga de la Justicia decide ir a la ofensiva y diseña un plan para eliminar a todos los supervillanos para siempre. Contando con la ayuda de otros superhéroes ponen en marcha su plan siendo muy eficaces en su ejecución. Así, empiezan a ser vistos como la única fuerza para poner orden en este mundo que se derrumba. El siguiente paso para asegurar su poder y defender a la Tierra fue la prohibición de alienígenas en nuestro planeta. De esta manera comienzan las guerras alienígenas que dan como resultado la expulsión de todos los extraterrestres de la Tierra. Sin embargo, esta decisión produce disensiones en la comunidad superheroica, con algunos grupos como los Titanes que comienzan a distanciarse del grupo principal. Estos acontecimientos dan lugar al régimen de Casas descrito en otros posts.
El anuncio de matrimonio de Superboy y Mary Marvel Jr., provoca recelos en otras Casas menores como la Casa de los Titanes, la de la Justicia y por supuesto la de los Secretos, que recuerdan con temor las purgas de los años 90. La gente que vive en el barrio goza de cierta libertad, aunque viva en la pobreza y piensa que la unión de las Casa del Acero y del Trueno puede dar lugar a una terrible dictadura. Por otro lado, a la asamblea de fuerzas alienígenas que conspira en la luna de Marte no le gusta la idea de que la Tierra sea gobernada por una élite superhumana.
Este es el escenario en el que se desarrolla el Crepúsculo de los Superhéroes. Mientras en Sandy’s, los vagabundos beben, Tío Sam murmura en un rincón, Plastic Man toma un trago con Blackhawk y el Doll Man se esconde en su vivero. Por otra parte, Question está investigando el extraño asesinato de un enano, que fue visto en un bar de alterne con una guapa y alta prostituta, a la que acompañó a un piso superior, siendo encontrado posteriormente atado y amordazado y con el cuello roto de un solo golpe seco. La habitación estaba cerrada sin otra salida posible, no encontrándose ni a la prostituta ni, por supuesto, el arma del crimen...
Continuará...
Uy qué cosas....
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